Neva

Neva es el segundo juego publicado en Steam de Nómada Studio, un estudio de desarrollo de videojuegos con sede en Barcelona que debutó en la industria con Gris. Dado que Gris ha sido uno de los juegos indies que más he disfrutado en los últimos años, no he dudado en hacerme con Neva tan pronto como he podido. Y no ha defraudado.

Neva es muchas cosas. Por un lado, un juego de plataformas y acción de mecánicas sencillas y muy limpias, típicas en este tipo de juegos, y que van mostrándose al jugador a medida que éste avanza en la historia de forma sencilla y divertida. Pero por otro lado, Neva es una obra de arte.

Los dos aspectos que más destcan de este juego son el visual y el musical. Como pasaba con Gris, Neva es una delicia tanto para la vista como para el oído, logrando que ambos aspectos se entrelacen a la perfección. El estilo visual es delicado y efímero, con una enorme variedad de tonos y trazos que parecen ser pura acuarela y que conforman el mundo por el que los personajes van avanzando a lo largo de la historia, un mundo de naturaleza vibrante y hermoso que está siendo invadido por una oscuridad oleosa y corrupta. Es a través de esta amplia muestra visual como la historia se va contando al jugador, ya que Neva, al igual que Gris, destaca por no tener conversaciones entre los personajes que la conforman. La música acompaña las escenas de forma magistral, destacando los cambios de escenario o cambiando cuando se produce una transición debido a una caída o a un combate. Es toda una experiencia que me ha dejado con ganas de volver a jugarlo y disfrutarlo de nuevo.

El juego nos invita a descubrir este hermoso mundo acompañado de una mujer con gafas y pelo blanco a la que nunca ponen nombre (investigando podemos descubrir que los desarrolladores la han denominado Alba) y su compañero Neva, un cachorro de lobo blanco (con cuernos de ciervo). A lo largo de esta exploración descubrimos que se están enfrentando a una oscuridad creciente que está invadiendo su mundo. Es a través de la colaboración mutua y del cariño que ambos personajes se manifiestan activamente que nos encariñamos con ellos, haciéndonos partícipes del vínculo que han formado a lo largo de su vida.

Las plataformas serán uno de los componentes más importantes del juego. A través de saltos y deslizamientos tendremos que recorrer el mapa para poder llegar a los lugares adonde nuestros personajes deben llegar. Pero en esta ocasión, y a diferencia de Gris, en Neva podemos luchar. Neva y Alba colabararán para vencer a los seres oscuros que aparecerán en nuestro camino. La mecánica de este combate es muy parecida a la que podemos encontrar en otros juegos de acción 2D, destacando sobre todo en la carga emocional de ver a nuestros dos personajes colaborando para vencer al enemigo.

En última instancia, Neva nos cuenta una historia acerca del vínculo entre dos seres que comparten una gran parte de sus vidas. Habla de crecimiento y evolución, de maternidad, colaboración, amor, amistad e independencia. De como todos esos aspectos se conjugan en una hermosa relación al que el jugador es invitado a sentir. La defensa del mundo natural es quizás el otro tema importante que este juego nos propone, teniendo que enfrentarnos a unos seres oscuros que parecen decididos a destruir el mundo tal y como lo estamos descubriendo, cubriéndolo de negrura y podredumbre.

En definitiva, una experiencia emotiva y artística que es probable que se convierta en uno de mis juegos favoritos de este año.